Estamos acabando una semana bastante intensa, una semana donde se aprobaron reformas a la LAIP cuyo único objetivo era dejar la ley inservible y sin embargo darle la impresión al pueblo que estaban luchando por reformar una ley que contenía fallas graves. Delante de la reacción de una parte de la sociedad civil, por un lado, y por el otro, del partido ARENA que nunca tuvo cualquier preocupación con la transparencia, razón por la cual resulta hipócrita su preocupación actual con la transparencia, el FMLN se vio obligado a dar marcha atrás a la reforma y tuvo que pedir al presidente Funes que vetara dicha reforma.
Igualmente se aprobó más una ley, la de los partidos políticos, que en principio buscaba crear un marco regulatorio para los partidos. Pero no deja de llamar la atención que la ley fue aprobada casi por unanimidad, algo que por sí solo, conociendo la dinámica de los “negocios” en la Asamblea Legislativa, uno se pregunta cómo es posible que una ley que busca regular a los partidos políticos pueda generar tanta simpatía. Pero es que la verdad la ley no regula prácticamente nada y deja en el limbo temas cruciales como la regulación de los donativos, informaciones sobre los donantes privados y el montante de la donación continúan siendo secretos partidarios; y mientras se vive en “plena democracia” en el país, la ley de los partidos políticos recién aprobada continua dejándole a las cúpulas partidarias la prerrogativa de nombrar a los candidatos a cargos electivos, y así, el mecanismo de las elecciones primarias será materia de una futura reforma a la ley de los partidos políticos. ¡Qué avance!
También tomamos conocimiento que el bloque formado por ARENA, GANA y PCN está articulándose para que el (ex) diputado Samayoa retorne a sus actividades parlamentarias lo más rápido posible, después que ciertos jueces se declararon incompetentes para juzgar el caso de agresión a su (ex) mujer y una resolución de la Cámara Primera de lo Penal calificó el caso como “delito leve”. Como estas cosas sólo en El Salvador pasan los diputados de las tres agremiaciones mencionadas resolvieron devolverle el fuero parlamentar al diputado Samayoa para que siga penqueando mujeres, y no sólo eso, están pensando en restituirle hasta 30 mil dólares por el tiempo que estuvo sin cobrar, la bondad de los diputados no tiene límite... Irónicamente, mientras un diputado está a punto de ser absuelto por agredir a su mujer, el presidente Funes y la primera dama Vanda Pignato participaron de la clausura de la Consulta Regional de América Latina y El Caribe para la Prevención y Eliminación de la Violencia de Género, evento convocado por ONU Mujeres y que tuvo como sede la ciudad capital salvadoreña...
Pero la semana no acaba por ahí, también tomamos conocimiento através de los medios de comunicación que ARENA está comenzando a entrar en entendimientos con el gobierno Funes para aprobar la reasignación de 85 millones de dólares oriundos del préstamo (emisión de eurobonos) de 800 millones que el gobierno consiguió en el mercado en el último semestre del año 2012. ¿Y cuál es la condición para dar sus votos? Según noticiaba el Diario Digital La Página, la condición que ARENA establece es la sustitución de Walter Araujo del Tribunal Supremo Electoral (TSE). Al parecer, el FMLN estaría dispuesto a dar sus votos para que el gobierno central pueda acceder a los 85 millones para financiar el presupuesto desfinanciado, aún de 2012. Y así, todo aquel discurso de austeridad y responsabilidad fiscal de ARENA está cayendo por tierra y, lo que ya era esperado, el partido tricolor está apenas chantajeando al gobierno para conseguir aquello que le interesa.
No deja de tener menor importancia el breve discurso que la diputada Lorena Peña se echó ayer en la Asamblea donde acusó a ARENA, sin tapujos, de una serie de robos y le recordó a los tricolores que el gobierno central ha llevado delante de la fiscalía 99 denuncias de actos de corrupción ocurridos en los gobiernos de ARENA. Me parece muy válida la actitud de la diputada, apenas se lamenta que tal reacción haya tenido como motivación el hecho que les hayan descubierto las verdaderas intenciones en las reformas a la LAIP que el trío FMLN, GANA y PCN habían aprobado y que el presidente Funes vetó esta semana.
Por cierto, ya que hablamos de dinero y presupuesto, la agencia Fitch Ratings “sentenció” que las perspectivas de crecimiento de El Salvador están muy por debajo de la media de crecimiento de la región, y al mismo tiempo dijo que las perspectivas crediticias del país están entre las peores, junto a países como Argentina y Venezuela. Y delante de ello la clase política salvadoreña parece estar más preocupada con aferrarse al poder que con buscar mejores perspectivas para el país.
Pero para cerrar la semana con broche de oro el magistrado Sidney Blanco nos informa que están en la fila la emisión de dos fallos de inconstitucionalidad de extrema importancia: sobre el TLC (Tratado de Libre Comercio) y sobre el nombramiento de los militares Salinas y Munguía Payés para los cargos de director de la PNC y del Ministerio de Defensa y Seguridad Pública respectivamente. Si los fallos de la Sala son favorables a las demandas de inconstitucionalidad el país estará entrando en más una crisis política. Diría yo, para no perder la costumbre…
Delante de tanto negocio turbio en la Asamblea y con espectativas tan sombrías para el país, yo pregunto, ¿qué se puede esperar de la clase política salvadoreña?
Edwin Lima
edwinlima.blogspot.com
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